Nalo, de lo alto nos nombra

 

 Nalo, de lo alto nos nombra

En ocasiones pienso que Nalo
que escribiendo relatos falleciera
no fue sepultado ni incinerado,
pero se transformó en un blanco pichuychanca.

Recién, hace poco tiempo, 
el vuela y de lo alto nos nombra,
¿No es por eso que mudos permanecemos,
elevando las desoladas miradas al cosmos?

Lo diviso hoy: sobre extraña tierra 
en la bruma vespertina, el pichuychanca 
en su curso, quedo y sosegado, vuela 
como, estando Nalo, continúa su senda.

Vuela, viaja su interminable sendero,
cantando, al parecer, algunos relatos,
parece que uno de ellos escuchamos, 
son similares las modulaciones.  

Un día volverá y con los nacientes pichuychancas
partiremos hendiendo el espacio, la neblina  sombría, 
y todos los que estéis en este mundo de los vivos,

entre los pichuychancas oiréis a los caros amigos de Nalo.

   
El Pichuychanca
Chiquian, 19 de noviembre 2023 

Bendita pelota

 

Bendita pelota 

En la empedrada y bulliciosa calle,
En el pardo patio de la escuela, 
En la vivaz canchita, lejos de la casa luego,
Jugando al futbol, mi pasión, me divertía.

El fiero viento no me importaba,

La torrencial lluvia no me importaba,

El intenso bochorno no me importaba,
Mas sólo me importaba corrrer y correr llevando

la bendita pelota adosado al pie.

Los infantiles e inquietos ojos
Al ver jugar en Jircan a brillantes futbolistas,  
Su pasión, su identidad, quedó prendado en mi cándida memoria 
Al equipo de sus amores defendiendo estoicamente.  

Más de pronto, Ya estoy jugando

En la selección de la escuela
En la selección del colegio después.
Y a los quince años en  el CAT. 

Con la bendita pelota, esfera semejante al sol y a la luna,

Adosada al pie y circulando el ceniciento campo, los sueños 
Se hacen realidad: surge la gambeta, la huacha, el sombrero,
El pase exacto y el ansiado gol, desbordando júbilo en el público.

El futbol aficionado que aprendí a jugar desde la infancia
A lo largo de mi vida lo llevo
En las venas, en el corazón, en la pupila de los ojos, 

En la verde membrana y en la exhalación diaria.
 
Misterioso lo siento el futbol aficionado que yo jugué.
Gravado en mi memoria viviente lo llevo
De aquella osadía y espontanea faena futbolera
Imborrable como tinta indeleble en el tiempo.  
     
 El Pichuychanca
Chiquian, 21 de noviembre 2023

Con Arnaldo Balarezo minaya. 

Con mi hermano Erich

Con Elvis, Nando y Enrique.

Club Atletico Tarapacá, uno de los mejores equipos de todos los tiempos. He escuchado decir por ahi. Será cierto? 
2 veces campeon en el AIB

Con mis hermanos, Erich, Perching. Mis camaradas en el campo

Yo, le llamo así

 

Yo le llamo asi

En mi ¡Patria Chica Querida!
una familia tengo,
donde reina 
el calor, la amistad,
el debate, la polémica también.
Y yo le llamo así:

La Incontrastable y generosa villa ciudad de Chiquian
¡Casa de la Cultura!

El Pichuychanca
Chiquian, 15 de noviembre 2023