viernes, 5 de julio de 2019

La tierra natal

Crepúsculo en Chiquian

La tierra natal


La tierra natal aprecio, porque por vez primera solté la palabra ¡Mamá! ¡vislumbré la luminaria! La tierra natal aprecio, porque por la alzada acera, por el empedrado patio, por el quejumbroso balcón a gatas iba. Más tarde, entre tropezón y celebración, a caminar aprendí. Aprecio la tierra natal, porque en la evocada escuela, conocí a los amigos de mi infancia, conocí al primer maestro, y a él, honda gratitud le guardo por haberme instruido con tesón y esmero La tierra natal aprecio, porque en las noches de calma y sosiego, en los fríos recodos del pueblo, en los fríos recodos de la morada, mis penas consolaba, en mis alegrías reía
de mi fugaz adolescencia.
La tierra natal aprecio, porque de sus entrañas, emergen milagrosos manantiales adonde acudía presuroso, luego de haber jugado al fútbol,
a fin de aplacar mi apremiante sed. Aprecio la tierra natal, porque por vez primera, en la orilla del ondeante mar de doradas espigas de trigo, reflejados por la suave lumbre de la luna, araña de la noche, ahí, debajo de la arcana penumbra y los murmullos aplacados de la frondosa copa del aromático árbol de eucalipto, todo ello, acompañado del homogéneo canto taciturno de los grillos, a la mocita de bermejo perfil y mirada de fuego, ruborizado, con el corazón alborotado, le revelaba mi sentimiento de ternura. El Pichuychanca Chiquian, Calle Tarapacá marzo 2019  


2 comentarios:

  1. Felicitaciones Hugo por tan elegante poema a los cuatro vientos chiquianos ,en mi imaginacion te escucho declamar alli en el atrio empedrado de tu escuelita 'JOSUE" aplausos amigo.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Hola estimada amiga Etel. Gracias por tu agradable comentario. Cada vez que visítanos la tierra natal surge derrepente algunos recuerdos y surgen, del corazón, inesperados versos. Saludos amiga

      Borrar