viernes, 31 de marzo de 2017

¡Oh! Generoso Yerupajá


Oh!  Generoso Yerupajá

¡Oh! sacro Yerupaja, de manto cano orlado. 
germen de mansa e irisada laguna. 
germen de alegre y sonoro riachuelo.
Tus leales admiradores, como de costumbre,  
se inclinan ante tu enternecedora estampa, 
  
Eres hogar del pastor impenitente
de espíritu franco y templado,
de tez tostado, huella del frio hielo. 
Dominando los cinco sentidos,  
tolera la aspereza de tu exaltada compañía. 
 
El perseverante peregrino 
que acude a contemplar 
tu fulgurante pico albino, 
embriagado de admiración  
aplaude tu belleza sin par. 
                                                                  
El ruiseñor con su canto sonoro, 
el pichuychanca con su trino encandilado, 
el apacible viento, por el camino agreste,  
acompañaron a los peregrinos 
con el fin de llegar a tu fastuosa estancia. 
 
Han topado alivio 
en el amoroso y velador prado, 
de donde apreciaron tu hermosura, 
logrando obtener paz y ventura y ternura
en su pecho henchido de júbilo. 

¡Oh! Rey de todos los nevados, 
Te abandonan con desconsuelo. 
Te evocaran con aprecio, 
de haber percibido con aplomo
 tu asombrosa y fragosa cresta argentada.
 
Ahora, compungidos se marchan, 
pero antes, con el corazón agitado, 
se postran ante ti.  ¡Oh! sacro Yerupaja,  
por favor… ¡bendíceles!. 

El Pichuychanca. 
Chiquian 31 de marzo 2017 




domingo, 12 de marzo de 2017

Pichuychanca cantor, dime...



Pichuychanca cantor dime...

Pichuychanca, amigo de la infancia, saltando contento en el alero del tejado, alzabas expeditivo vuelo a ignoto sino. Por la mañana, con tu canto aflautado me despertabas del sopor profundo. Hoy, abatido ¡no siento tu lindo trino! La rosaleda del jardín su hechizo perdió. El patio de la casa su esplendor perdió. De orilla a orilla la afligida brisa murmura lamentando tu súbito éxodo sin retorno. Tu ausencia, el silencio mata mi corazón Hoy, abatido ¡no siento tu lindo trino! Dime Pichuychanca cantor, ¡Dime! ¿Por qué te fuiste? ¡Dime! ¿Quién es el causante? ¡Dime! ¿Somos nosotros, los humanos? Hoy, abatido ¡no siento tu lindo trino! Pichuychanca, amigo de la infancia, una y otra vez me reprocho, ¡me reprocho! Los causantes somos nosotros, ¡insensatos! ¡Estamos emponzoñando el medio ambiente!, ¡Ya no se siembra el trigo, el maíz, tu alimento! Tú, amigo Pichuychanca, vuelas a derroteros ignotos, cual humano emigrando, buscando abrigo y sustento. ¡Ay! ¡Ya no siento tu lindo y aflautado trino! El Pichuychanca. Chiquian, Calle Tarapacá, 12 de marzo 2017



Campos abandonados

        

Chiquian. Foto cortesía de Jorge Duran Silva



Campos abandonados


Alzo hacia mi  pueblo
mi libre camino,
mis meditaciones…
siguen soñando
yo, solo observo…
padezco observando...

No perdona al pasto el lacerante estío
como a la masa del pan el horno.
Humilla, amarilla al verde labrantío.
Ahoga el tic tac del loable labriego
de ver hollado el sembrío por el estío. 
El trino gozoso de los pájaros no se oye.

El maíz, el trigo, la papa  
que alguna vez esmaltaron los próvidos campos,
floreciendo en abundancia, 
subiendo derrotero  al cielo, 
dotando de dicha al franco labrador,
¡Sucumbieron!    
  
En el pasado, el labriego indómito 
colmado de constante deleite, 
en armonía anidando 
con el fecundo campo labrado,
se halla con el alma molida ahora.
Contra su voluntad, ¡yace mísero!

La luna, lumbre de noche sombría,
al campo desdeñado alumbra,
al plañidero pueblo alumbra.
a la pastoril calle alumbra
por donde vaga el taciturno labriego. 

La inmaculada aurora, 
despierta a la floresta envejecida. 
En la puesta del sol, 
monótono sopla el viento frío
por el lóbrego desnudo campo.

Hoy, susurra doloroso por yermo collado
el alegre riachuelo de ayer.
El Labriego callado y desolado y lastimado
con ojos azarosos 
ve el campo hollado por el vil tiempo.
Se ausentaron las aves del despojado prado.

El Pichuychanca.      
Chiquian, Rumichaca 12 de marzo 2017


sábado, 4 de marzo de 2017

Preservando nuestro medio ambiente.



Se vienen tiempos caóticos por efectos del cambio climático, y los gobiernos de turno miran por otro lado, no toman conciencia sobre este grave problema. 

Tambien es responsabilidad de todos los ciudadanos y ciudadanas de preservar y cuidar  el ecosistema. Por otro lado, las autoridades tienen la obligación y el deber de hacer estudios y  proyectos de impacto ambiental  y turísmo.  

Se debe realizar una educación integral en el desarrollo de la vida de los individuos formando  valores y actitudes con un alto grado de conciencia y cultura ambiental para un desarrollo sostenible del país.

En el párrafo siguiente de la Política Nacional Del Ambiente (DS. 012 - 2009 – MINAM) dice: “Desarrollar la educación y la cultura ambiental orientadas a la formación de una ciudadanía ambientalmente responsable y una sociedad peruana sostenible, competitiva, inclusiva y con identidad”.

Todo esto queda de lado, porque en la práctica las autoridades elegidas cada cierto tiempo, se ven comprometidos en casos de corrupción dando prioridad a la utilidad y economía; contaminando, devastando, desforestando los mares, los cerros, ríos  y los bosques con la ya consabida palabra de “desarrollo”, de esta manera, amparando a las empresas y grupos de poder económico y menoscabando el medio ambiente y por ende a la sociedad en su conjunto. 

Aquí  hermosas fotos  por cortesía de mi amigo Jorge Duran Silva. ¡¡Así como las vemos ahora!!, que perduren por los siglos de los siglos. ¡¡Así sea!! 



































El Pichuychanca.

Chiquian, marzo 2017