Da vida a los sedientos páramos
Triste... triste, se despertó el nevado de Copa.
Días... días, que se ha ausentado la ingrata lluvia.
Ya no tiene a la compañera quien mojaba su cima helada.
Tanta tristeza tiene
que ya no puede contener más sus pocas lágrimas de plata.
Conmovido por su tristeza de mis ojos saltan ríos de dolor.
Sin embargo, nuestras dolorosas lágrimas al unirse,
da vida al risueño río de Marcará,
da vida a los sedientos páramos,
da vida a los sedientos seres vivos.
El Pichuychanca
Marcará, 13 de abril 2023